El arte como muro para frenar el coronavirus en Dakar
En Dakar, la capital de Senegal, el arte es omnipresente. En la ciudad puede sonar y se puede bailar sabar, el ritmo más representativo de la cultura wolof, en una noche cualquiera o disfrutar de llamativos murales que impregnan de mensajes sociales muchos lugares de la capital. Es precisamente el uso de este arte urbano lo que ha contribuido a la mayor sensibilización del coronavirus en el último mes, con una serie de grafitis que por su color y compromiso han generado un gran impacto en la población. En Wiriko hemos hablado con dos de las organizadores que los han llevado a cabo.
Yeumbeul, Keur Mbaye Fall, Diamaguène y Malika son cuatro barrios de las afueras de Dakar que lucen desde hace semanas cinco murales sobre la importancia de adoptar una serie de hábitos para evitar la propagación del virus: cómo estornudar o toser correctamente, la importancia de lavarse habitualmente las manos, los números telefónicos de los servicios de urgencia…Detrás de estas intervenciones está Undu Graff, un colectivo de grafiteros que busca desde 2018 crear conciencia de los problemas de la sociedad senegalesa a través del arte. La idea partió de su responsable, Ati Diallo, al comprobar que las indicaciones creadas para controlar la pandemia no podían ser leídas por muchos de sus vecinos: “Entonces les dije a mis amigos del grafiti que hicieran uno que creara conciencia sobre los gestos para evitar el Covid-19. Así que compré pintura y los tres artistas del grafiti del grupo Undu Graff hicieron el primero de ellos en la sala de maternidad en Yeumbeul Nord”, recuerda.
A través de estas imágenes bastante representativas, Diallo señala que su aspiración es conseguir concienciar y “dar la información correcta a la población”. Las indicaciones plasmadas en estas paredes permiten a cualquier viandante comprender cómo protegerse del coronavirus. Pero, además, “es una oportunidad única para nosotros, como artistas, de apoyar al Estado de Senegal en su política de comunicación de masas”.
De su arraigada conciencia social nacen los brochazos de uno de los autores de los grafitis ideados por Undu Graff. Charlestyle es un senegalés de Malika, uno de los barrios más desfavorecidos de Dakar, que ha estado contribuyendo con su arte a crear conciencia sobre el virus. Como explica, la chispa creadora de su arte no es más que la propia concienciación social: “Lo que me inspira es el espíritu de conciencia, limpiar y decorar las paredes de nuestros barrios. Por eso comencé a cumplir con mi deber cívico mediante este arte urbano que es el grafiti”.
Charlestyle confía plenamente en el poder del arte urbano y recuerda que el grafiti ha estado vivo desde hace muchos años en Senegal, como un elemento clave para expandir conciencia social en los barrios, en los vecindarios donde solo es necesario unas “paredes en ruina” para poner en marcha toda su fortaleza. Ahora, con la crisis del coronavirus, el arte de usar el espray y la pintura acrílica para remover conciencia no podía quedarse atrás.
Todo este movimiento cívico ha tenido su contrapartida en la respuesta social, una población que ha agradecido que varios colectivos de la capital senegalesa hayan sensibilizado a través del arte. Así lo destaca, Serigne Mansour Fall, conocido como Mazdoo y propulsor de esta acción para RBS Crew. Este colectivo de artistas del grafiti de Dakar, que aspira a usar esta disciplina al mas alto nivel a través de mensajes filosóficos, es otra de las organizaciones que ha grafiteado paredes vacías en los barrios de la capital.
Su primera intervención tuvo lugar en una de las fachadas principales de la Universidad Cheikh Anta Diop de Dakar, a iniciativa de la institución académica. Tras este mural, le han seguido muchos más por otras vecindades que han generado un importante impacto social, también gracias a las fotos subidas en las redes sociales de Facebook e Instagram. “Hemos subido los murales en las redes sociales y su proceso de realización y hemos tenido una respuesta positiva, la gente nos ha visto, nos ha felicitado y nos ha reconocido».
Además, estas acciones, según señala Serigne, han tenido su réplica en otros países del África occidental como Togo, Benin o Guinea, donde después de ver el éxito senegalés también han realizado murales de sensibilización.