Watu Wote: El terror de Al shabab nominado a los Oscar
Esta vez solo se trata del titular. Esta historia de tan solo 22 minutos y nominada a los Oscar en la categoría de mejor cortometraje es un soplo de aire fresco. Un puntapié a la retórica racista de Trump y a los discursos bañados en fuego de algunos líderes incitando al odio contra el “otro”. Un ejemplo, uno más, de que no se trata de un conflicto religioso sino de terrorismo. A secas. La película Watu Wote: All of Us, dirigida por la alemana Katja Benrath, escrita por Julia Drache y producida por Tobias Rosen, cuenta los hechos reales de diciembre de 2015 que sufrieron los pasajeros de un autobús que se dirigía a Mandera, una pequeña ciudad en el noreste de Kenia, frontera con Somalia. El grupo terrorista al-Shabaab intentó replicar el modelo de asalto y reivindicación que llevara a cabo un año antes (noviembre de 2014) en el que asesinó a los cristianos del autobús, después de separarlos de los musulmanes. Una masacre con 28 fallecidos.
Pero en esta ocasión no fue así. Los pasajeros musulmanes se negaron a cumplir con la demanda de los asaltantes de que identificaran a los cristianos entre ellos, salvándolos de una muerte casi segura. Incluso después de que los terroristas amenazaran con disparar, los musulmanes protegieron a sus hermanos y hermanas e incluso les dieron atuendos religiosos para que no fueran identificados fácilmente. Valentía. Amor. No obstante, murieron dos personas y otras tantas resultaron heridas. La ansiedad incesante creada por el conflicto persistió hasta que un día los pasajeros demostraron que la fe y la solidaridad pueden prevalecer sobre los actos de terror y violencia.
El nairobense Abdi Latif Dahir lo explica así: “Desde hace varios años, Kenia ha sido blanco de ataques terroristas, especialmente desde la intervención del ejército en Somalia en 2011. Los crecientes atentados de Al-Shabaab han desestabilizado la armonía religiosa. De hecho, en sus videos de reclutamiento y mensajes en redes sociales, han jugado con los agravios a los que se enfrentan los musulmanes en una nación de mayoría cristiana, incluida la pobreza, la discriminación y el subdesarrollo en sus regiones”.
La película ya ha ganado más de 35 premios de festivales de cine, incluido el Gold Student Academy Award, los Oscar de los estudiantes de cine, en la categoría de mejor narrativa. Es un hito cinematográfico. Pero también social. El destino quiso que el mismo día de la nominación a los prestigiosos premios de la Academia de Cine de Hollywood se estrenara en Kenia, en el Centro comercial Wesgate de Nairobi. Hay que hablar de ello para superar el miedo. Los miedos. Y por eso como explica Bryan Mwangui “es necesario que se visibilice que en Kenia la convivencia entre religiones es pacífica a pesar de que la prensa internacional se empeñe en mostrar lo contrario”.
La película está protagonizada por Adelyne Wairimu, Barkhad Abdirahman y Fasal Ahrmed (Capitán Phillips) y Abdiwali Farrah (Fishing Without Nets).
El 4 de marzo sabremos si este fogonazo de luz se hace todavía más viral.
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